Doradazo con baitcast en Empedrado, el nuevo destino de Pousadas Puerto Paraíso
La primavera comenzó con muy buenas noticias para los pescadores que buscan, además de los gigantes del alto Paraná, una experiencia sensorial y un excelente servicio de pesca, que se destaca dentro y fuera del río.
Invitados por Francisco Teitelman, nos dirigimos hasta el litoral para conocer el nuevo destino de Pousadas Puerto Paraíso. Así llegamos hasta “La Perla del Paraná”, Empedrado una mítica localidad correntina, ubicada unos 55 km al sur de la capital de la provincia sobre la ruta 12 a unos 57km del aeropuerto de Corrientes Dr Fernando Piragine Niveyro. Ahí nos esperaba Emerson, responsable de Puerto Paraíso Empedrado quien nos recibió para presentarnos una verdadera maravilla para los pescadores y sus familias.
Recostado a escasos metros del río, y dueño de una vista imponente nos encontrarnos con las destacadas instalaciones del hotel Tramonto.
Emplazado sobre unas de las populares barrancas de Empedrado con el río Paraná como paisaje principal, el Tramonto nos ofrece un excelente servicio de hotelería. En un predio parquizado de unas 4 hectárea, pensado para el descanso y el disfrute de toda la familia. Patio de juegos para los niños, una gran piscina que es el corazón del hotel, espacios de lectura, sala de juegos para adultos, un bar con vista al río, su propia huerta, quincho para los pescadores y bajada de lanchas propia son algunas de las características que ofrece Puerto Paraíso en esta locación.
La gastronomía merece un párrafo aparte. La ubicación de los comedores y su ambientación, se perciben como el complemento perfecto de la excelencia de cada una de las preparaciones que ofrece su carta de menúes, donde el cheff se luce en cada entrada, en cada plato principal y en todos sus postres.
Con carnes de una calidad suprema, variedad de pescados, preparaciones con productos regionales y su menú vegano, hacen que la estadía sea un verdadero placer para los sentidos de todos los integrantes de la familia.
En la costa, circunstancialmente “desfigurada” por la creciente del río, nos esperaba una de las cómodas y potentes embarcaciones con las que nos tiene acostumbrado Puerto Paraíso. Una lancha de 6.20 mt. de eslora con un impulsor de 90 HP, además de Augusto quien sería nuestro guía para las próximas salidas.
Comenzamos navegando aguas abajo mientras preparábamos nuestros equipos para pescar con carnada, modalidad que predominaría en toda la jornada. Con cañas 15-30 lb. multifilamento de 0.23 mm, plomadas de 40 gr y anzuelos 7/0 y 8/0 encarnadas con morenitas y anguilas, nos amarramos a la copa de un árbol caído en la parte norte de la Isla Salomón para probar suerte.
Unos instantes después de anclarnos vimos que, en la orilla, el movimiento de un pez generó un borbollón importante y si bien el agua estaba muy turbia, de inmediato alistamos una caña de baitcast de 10-20 lb, con un reel huevito a la cual le colocamos un señuelo tipo crank o “globito” de color oscuro y empezamos a golpear la costa. Después de varios tiros, Augusto recomienda cambiar el señuelo por una banana blanca de pala 1.
El río en una altura de 6 mts en el puerto de Empedrado, las islas absolutamente sumergidas y las aguas de color “té con leche” no ayudaba para el bait, no obstante, nuestra “banana cardenal” comenzó a recibir “toques” de doradillos sin poder lograr capturas. Aunque unos tiros después, y casi pegada a la lancha, un terrible pique torció la punta de la caña.
El salto, mostró la identidad y las dimensiones de un magnífico pez. Un hermoso ejemplar de dorado había cazado el señuelo y comenzaba la pelea.
Luego de una gran lucha con un equipo liviano, subimos a la lancha este hermoso dorado que sobrepasaba los 91 cm.
Nos apresuramos a sacar unas fotos para poder devolver a este doradazo nuevamente al río.
Si bien tuvimos varios piques y capturas de dorados de menor porte y algunas especies de cuero, debemos aclarar que las condiciones del río no son las deseadas. Islas totalmente inundadas, que generan todo tipo de “accidentes”, provocando correderas en lugares inaccesibles para una embarcación y zonas difíciles de pescar, sumado a la gran turbidez del agua y a la cantidad de material que arrastra su alto caudal, hacen que la pesca se dificulte. De todos modos, la actividad de dorados en Empedrado es impresionante, ya que se pueden ver ataques permanentes a cardúmenes de mojarras en el corazón de las copas de los árboles sumergidos sobre las islas.
Queremos agradecer a Pousadas Puerto Paraíso en nombre de uno de sus titulares Francisco Teitelman; a Emerson, responsable de este nuevo destino, así como también a los anfitriones, Sandra y Alberto propietarios de Tramonto Hotel, al personal de servicio que estuvo en cada uno de los detalles y, que junto a Augusto, nuestro guía, hicieron de la estadía, una experiencia excepcional.
Por Ezequiel Fusero
Pescadores: Sergio Revilla y Ezequiel Fusero
Producción gral., fotografía y videos: Ezequiel Fusero, Sergio Revilla
Edición de video: Sergio Revilla
